Está claro que su papel es fundamental en el buen funcionamiento de los procesos comerciales. La vuelta a la normalidad supuso la recuperación de los procesos tal como se hacían antes del confinamiento, con una excepción: la forma de comprar había cambiado.

Según datos del informe de logística europea 2022 de la consultora Knight Frank, el comercio online va a vivir un aumento sustancial de sus ventas en los próximos 5 años. Siendo de un 48%, países como Francia, Alemania o España verán este crecimiento reflejado en sus números.

Pese a que este aumento implica una mejora del sector al aumentar su actividad, no viene acompañada de una adaptación de los medios.

Problema: crecimiento del e-Commerce

Aunque el sector logístico está en auge, la adaptación de las herramientas y servicios no puede darse con la misma velocidad, y es que muchos factores influyen en el buen funcionamiento de la cadena de suministro.

En este aspecto, desde la elaboración hasta la distribución final de los productos, la logística debe adaptarse a su nueva realidad. Tras la pandemia del Covid 19 y la vuelta a la normalidad, la tendencia de las compras online aumentó de manera drástica.

Con este crecimiento de ventas de manera telemática se debe tener en cuenta un factor esencial: el perfil del cliente. Al cambiar el canal en el que se realiza la compra también varían las exigencias de los clientes, generando nuevas necesidades para las que el sector puede no estar preparado.

La búsqueda de una velocidad de entrega, reducción de costes y comodidad en las compras hacen del e-Commerce un desafío logístico. Los retos de mantener un control adecuado del stock, productos cerca de sus putos de envío y una distribución rápida y eficaz, todo ello cumpliendo las exigencias de sostenibilidad, hacen de los procesos logísticos un gran reto.

Solución: Última milla

Ante este panorama, ¿qué soluciones ofrece la última milla?

El proceso de la cadena de suministro puede incorporar distintas herramientas y procesos, como el almacenaje, pero la distribución es uno de los factores clave que pueden permitir una mejora en la adaptación a las nuevas exigencias de la demanda.

La última milla, también denominada distribución capilar, es un modo de gestión de transporte orientado al cliente final. En localidades con gran concentración de demanda como las grandes ciudades, la incorporación de este tipo de distribución ofrece grandes ventajas.

De cara al cliente, este último paso es de los más decisivos. Lograr una buena experiencia en la entrega final supone una visión positiva tanto de la empresa como de sus gestiones internas.

Dentro de la última milla encontramos una variedad de formas de hacer esta distribución final. Debido al auge del comercio electrónico la mayor concentración de actividad se genera en este paso, por lo que hay una gran cantidad de soluciones creadas para poder afrontar esta alta demanda.

Hubs

A diferencia de un almacén convencional, los hubs tienen un tamaño reducido y se encuentran en ubicaciones clave en los centros urbanos, permitiendo una mejor agilidad en la realización de entregas y una reducción en los costes de desplazamiento. De esta forma, enlazar la distribución de última milla con los hubs ayuda a hacer frente a la alta demanda, permitiendo un mejor control de los procesos y agilizando diversas operaciones.

Puntos de recogida / recogida en tienda

Para ofrecer un servicio más flexible y aumentar la comodidad del cliente se encuentran los puntos de recogida. Son establecimientos en los que los paquetes pueden ser recogidos por los propios clientes en distintas localizaciones. Ofreciendo la posibilidad de un horario de recogida flexible, se logran reducir los tiempos de entrega y se realizan de manera síncrona la entrega de varios productos en el mismo momento, reduciendo la carga de trabajo.

También es posible mejorar la experiencia del cliente permitiéndole recoger su perdido en tienda. Este hecho no solo ayuda a reducir la carga de los vehículos de transporte, sino que permite al cliente conocer de primera mano a los expedidores de su paquete, y humaniza el trato permitiéndoles conocer a los propios trabajadores.

Dark Stores

Muchas empresas han pasado a esta nueva forma de realización de pedidos, orientada un 100% a la elaboración de paquetes pedidos de forma online. Estos establecimientos no atienden al público, sino que se dedican de forma exclusiva a el comercio online, de modo que se puede ver como una tienda pero realmente se trataría de un almacén.

Estas son solo algunas de las nuevas formas de hacer logística. Adaptándose de manera continua a las exigencias de la demanda, hacer frente al comercio online es una necesidad para poder estar a la altura de la evolución de la supply chain.